En su vuelta a la TV, Mirtha Legrand habló sobre Marcelo Tinelli contó que “no puede dejar de ver” La Academia
El conductor había expresado este viernes que estaba muy contento de que “La Chiqui” retome la conducción de su programa
LA NACIONLuego de que Marcelo Tinelli le haya dedicado unas sentidas palabras a Mirtha Legrand durante su programa, con el regreso de la diva a la pantalla chica, “La Chiqui” le devolvió el gesto. “Tu programa es maravilloso Marcelo, es maravilloso, no puedo dejar de verlo”, dijo Legrand.
Sentada en su escritorio, la conductora agradeció a todos los que le enviaron flores, entre ellos Tinelli, Graciela Ocaña, Baby Etchecopar y Roberto Moldavsky, quien iba a asistir como invitado pero finalmente se excusó por cuestiones personales.
El conductor de La Academia se mostró muy contento de que La Chiqui retome la conducción de su clásico programa. “Le mandamos un beso gigante a Mirtha Legrand que mañana vuelve a la tele. Un beso gigante, querida Mirtha”, dijo este viernes.
Además, durante su programa, Tinelli le hizo un explícito pedido a Pampita, es una de las invitadas de La Noche de Mirtha. “Mándele un beso de parte de todos nosotros que la extrañamos y que la queremos mucho. Sé que ella nos ve siempre y la queremos. Es una diosa, una reina y me encanta que esté en la tele. ¡Se la extraña siempre a Mirtha! Así que felicitaciones, me encanta”, cerró el hincha de San Lorenzo.
Mirtha compartió su regreso a la televisión con el ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, los periodistas Jonatan Viale y Baby Etchecopar, y la modelo Pampita Ardohain, quienes le pondrá el toque de frescura y farándula a la “mesaza”.
LA NACIONTemas
Más leídas de Espectáculos
En fotos. Del reencuentro de Mariana Fabbiani y Gastón Portal a la salida en familia de Pamela David
A los 61 años. Murió Steve Albini, el productor que le propuso a Nirvana dirimir en un juego de pool sus honorarios
"Lo tuve todo". Nelly Beltrán: el amor de su vida, la muerte joven de su querida “Moniquita” y la diabetes que la dejó ciega